Cada tipo de labio es distinto, por lo que, el tratamiento del mismo también debería serlo.
Un error muy común cuando buscamos realizarnos un tratamiento de aumento de labios es basar nuestra decisión únicamente en el precio, sin tener en cuenta el tipo de producto o la experiencia del especialista que va a realizar la intervención.
Lo primero a valorar es la forma de labio que tiene el paciente ya que el procedimiento no será el mismo en el caso de un labio fino, un labio grueso, labios desiguales (en cuanto al labio superior e inferior), labios con arco pronunciado, etc.
Hay pacientes que deseen respetar la forma del mismo por lo que en el caso de tener labios desiguales, se aumentará en igual proporción, dejándolos más gruesos, pero sin cambiar el aspecto original de su rostro, esto hará, por ejemplo, que el cambio sea menos brusco y que sea mínimamente percibido por los demás, ya que nos verán favorecid@s pero sin ninguna alteración destacable.
En cambio, otras pacientes acuden a consulta, pidiéndonos igualar ambos labios, en este caso, lo más importante siempre será mantener la armonía y también el aspecto natural de los mismos y del rostro.
Otro punto a tener en consulta son las expectativas que tiene el paciente sobre el tratamiento, por lo que el estudio inicial, junto a las peticiones y el objetivo de mantener la armonía y naturalidad en todo momento, harán que los resultados sean los deseados.
Antes y después de un aumento de labios con con ácido hialurónico
Antes de seguir con los resultados de un aumento de labios, os queremos contar un poco más sobre qué es el ácido hialurónico.
¿Qué es el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es un componente presente de forma natural en nuestro cuerpo por lo que no es un producto peligroso ni mucho menos. Gracias al ácido hialurónico, podemos mejorar la forma del labio, consiguiendo además de un aumento del mismo, un perfilado y una hidratación perfecta.
Este producto es muy versátil, pues puede ser utilizado desde para rejuvenecer la zona del código de barras rellenando sus arrugas, corregir asimetrías, aumentar, perfilar e hidratar nuestros labios, marcar el arco de cupido y hasta disminuir la sonrisa gingival (ya que, al aumentar el grosor del labio, la mandíbula quedará menos expuesta al sonreír).
En el caso de optar por un aumento de labios, nuestro médico nos aconsejará qué tipo de producto es mejor para nuestro caso y qué cantidad será necesaria para conseguir nuestro objetivo, siendo lo más común empezar con un vial (1ml), y en el caso de que se desee un mayor grosor, espaciar las citas para seguir con el aumento hasta llegar al aumento de labios deseado.
Los resultados, serán visibles en un periodo de hasta 6 meses a un año, dependiendo de la absorción que tenga el organismo sobre el producto, que como ya hemos comentado anteriormente, es un componente natural del cuerpo, por lo que éste lo irá absorbiendo poco a poco hasta volver a su estado original.
Proceso por el que pasan nuestros labios tras la realización de un aumento con AH
Puede suceder, que, tras la realización de este tipo de procedimientos, surjan muchas dudas, y quizá alguna quede no resuelta, dando pie a malentendidos o a creernos que el tratamiento no ha salido como debería. Por ello, a continuación, vamos a enumerar una lista de posibles síntomas que podrían aparecer durante el proceso de absorción del producto por parte de la zona infiltrada, en este caso los labios. Todos ellos temporales, pero importantes a tener en cuenta:
- Los primeros días (2-3 días tras el tratamiento) es cuando los labios pueden estar más hinchados. Esto no es una mala señal, ni tenemos que preocuparnos por ello, simplemente debemos saber que el cuerpo se tiene que acostumbrar a ese producto hasta ahora desconocido y, además, las inyecciones han podido irritar la zona. Así que antes de entrar en pánico, es mejor esperar unos días a que baje la hinchazón hasta poder ver el resultado final. En algunos casos, el médico puede recomendarnos la toma de algún medicamento antiinflamatorio como es el ibuprofeno, pero no en todos los casos es necesario.
- Entre el 3 y 4 día, podemos empezar a apreciar como el labio va cambiando de tamaño y la hinchazón va bajando por zonas. En esta etapa, también podremos notar algún que otro bultito, que aunque, invisible a la vista, habrá que disolver. Cuando notamos esto, quizá lo primero que pensamos es que el producto se ha “encapsulado” y que no se ha integrado bien, pero nada tiene que ver, a estas alturas el producto aún no está “100% integrado”. Aunque no lo creamos, el aumento de labios hasta conseguir un buen resultado es un proceso “lento” y tenemos que ser pacientes. Que aparezca algún bultito es normal, así es que nuestro médic@ deberá recomendarnos masajear la zona infiltrada tras haber pasado 24/48h después de la infiltración,unas 1 o 2 veces al día. De esta manera, iremos notando cómo poco a poco van desapareciendo.
- La etapa más esperada: Una vez integrado el producto 100%, podremos ver el resultado final y no podremos dejar de mirarnos al espejo, de lo favorecid@ y natural que nos vamos a ver. ¡Nuestros pacientes de Clinica Villoria quedan encantados!
- Ahora que ya conocemos todo el proceso, sólo tenemos que pedir nuestra primera cita informativa. En ella, escucharemos tus peticiones y estudiaremos tu caso en particular. Nuestro objetivo es que salgas encantad@, consiguiendo con este aumento de labios o perfilado de los mismos, realzar tu belleza natural. ¡En Clínica Villoria te estamos esperando!
Una vez que ya obtenemos el resultado final, será el momento de decidir si queremos seguir aumentando, o, por el contrario, nos gustan así. En cualquiera de los casos, deberemos valorar con el especialista si a los 6 meses realizar otra infiltración (Ya que antes de estos 6 meses no es recomendable). Con esto, conseguiremos mantener el grosor deseado además de aumentar algo más en el caso de que fuese necesario y así lo deseemos.